El relicario
A. Oliveros – J. P. Estilo – J. Padilla
El relicario
A. Oliveros – J. P. Estilo – J. Padilla
Un día de San Eugenio
yendo hacia el pardo le conocí.
Era el torero de mas tranío
y el mas castizo de to Madrid.
lba en calesa, pidiendo guerra,
y yo al mirarle, me estremecí.
Y él al notarlo bajó del coche,
y muy garboso vino hacia mí.
Tiró la capa con gesto altivo
y descubriéndose me dijo así:
Pisa morena, pisa con garbo,
que un relicario, que un relicario
me voy a hacer.
Con el trocito, de mi capote,
que haya pisado, que haya pisado
tan lindo pie.
Un lunes abrileño
él toreaba y a verle fui;
nunca lo hiciera que aquella tarde
de sentimiento crei morir.
Al dar un lance, cayó en la arena,
se sentió herido, miró hacia mí;
y un relicario sacó del pecho,
que yo en seguida reconocí.
Cuando el torero caía inerte
en su delirio decía así: